Desde un punto de vista químico, el polietileno (o PE) es el polímero más simple, formado por una unidad repetitiva y lineal de átomos de carbono e hidrógeno

Es el plástico más común y barato. El polietileno se puede realizar mediante diversos procesos y cuando se produce con inyección plástica se elaboran envases, diversos artículos para el hogar (cajones, contenedores…) y juguetes.

Propiedades y características del polietileno

Siendo un material muy sencillo es de gran uso para muchas aplicaciones por destacar en características como:
  • Químicamente inerte (no es casi reactivo) y su aspecto es traslúcido y blancuzco.
  • A temperaturas normales muestra tenacidad y flexibilidad, y su superficie es rayable y blanda.
  • Cuando está en estado líquido, su comportamiento es el de un fluido no newtoniano: su viscosidad cambia con la temperatura y al aplicársele tensión cortante. Por ello, ofrece resistencia a fuerzas de gran potencia cuando se somete a bajas temperaturas.
  • El plástico polietileno no es un buen conductor ni de calor ni de electricidad, y por eso es ideal como aislante (para cables, por ejemplo).
  • El polietileno tiene un punto de fusión de 110°C, y cuando se reduce por debajo de la temperatura ambiente, es mayor su dureza, pero también su fragilidad; su viscosidad, por otra parte, disminuye a una mayor temperatura.

Tipos de polietileno

Según la densidad del polietileno existen dos tipos: polietileno de baja densidad (o PEBD – PELD) y polietileno de alta densidad (o PEAD – PEHD)
  • Polietileno de baja densidad (o PEBD – PELD)
    El polietileno de baja densidad tiene gran tenacidad y rigidez y se utiliza para elaborar una inmensa variedad de productos, como bolsas de plástico de todo tipo, tuberías para riego, envasado de alimentos, pomos, productos industriales…
  • Polietileno de alta densidad (o PEAD – PEHD)
    El polietileno de alta densidad, por su parte, presenta una mejor resistencia al impacto, y mayor resistencia térmica y química. Sus principales usos son para fabricar envases de alta dureza, todo tipo de cajas, tambores, tuberías para gas, líneas de telefonía, guías de cadena y piezas mecánicas…

Principales usos del polietileno

Como hemos visto, su aplicación es variadísima, produciéndose artículos de todo tipo tanto en polietileno de baja densidad como de alta densidad. El polietileno de baja densidad es más flexible y potencia propiedades como la claridad. Se usa sobre todo en:
  • La fabricación de papel film para envases y embalajes (film retráctil o industrial).

  • La producción de cubiertas para cables (telecomunicaciones, electricidad).

  • El envasado de alimentos, en contenedores de alimentos domésticos para guardar comida en la nevera, por ejemplo, y juguetes.

  • En la industria médica es muy empleado para fabricar las bolsas de suero, goteros, monodosis…

Con el polietileno de alta densidad se producen principalmente:
  • Envases para cosméticos, detergentes, productos químicos, sustancias peligrosas y derivados del petróleo.

  • Tuberías de presión para gas, agua y riego, y para tuberías de drenaje, saneamiento y como protección de cables.

El polietileno, ya sea de baja o de alta densidad, lo podemos encontrar en una gran diversidad de objetos a nuestro alrededor, desde la silla donde nos sentamos hasta el teclado donde escribimos, pasando por la botella de agua que sacamos del refrigerador.